El Gobierno ha condenado hoy los "graves sucesos violentos" ocurridos en Nicaragua y ha pedido que se respeten los derechos de "reunión, manifestación y libertad de expresión" y "se investiguen toda las muertes ocurridas desde el 18 de abril".

Así lo ha expresado la ministra portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, en la conferencia de prensa al término de la reunión del Consejo de Ministros.

La reacción del Ejecutivo llega después de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) confirmara que, desde el comienzo de las protestas, el número total de víctimas es de 277 personas asesinadas y más de 2.000 heridas, y que la represión se ha incrementado en la última semana.

España "siempre apoya el diálogo", ha subrayado Celaá, quien ha señalado que el Ejecutivo también "valora muy positivamente" la declaración especial adoptada por los jefes de Estado y de Gobierno del Sistema de Integración Centroamericana y la voluntad expresada por la Secretaría de "apoyar el diálogo nacional".

"Esta es una cuestión muy importante", ha apuntado.