El PP ve lógica, e incluso legítima, la protesta en la calle con reclamos como la subida de las pensiones, pero ha advertido hoy de que tiene que gobernar con "sensatez" y sin "gastar a lo loco", y pide a los demás partidos un diálogo "serio" alejado del "populismo" que permita llegar a acuerdos.

Los populares han hecho este análisis en la reunión del Comité Ejecutivo nacional que ha presidido Mariano Rajoy y que ha servido para preparar la convención nacional del partido en abril, una cita que tendrá como lema "Contigo crece España" y en la que el PP presumirá de gestión y pondrá en valor la recuperación económica lograda en sus años de gobierno.

El coordinador general del partido, Fernando Martínez-Maíllo, ha rechazado entrar en "discusiones populistas y simplistas" que no ayudan al acuerdo al ser preguntado por la propuesta del líder del PSOE, Pedro Sánchez, de que el salario de diputados y senadores aumente solo el 0,25 por ciento como las pensiones.

Y ha advertido de que son otros partidos los que no quieren alcanzar pactos porque el PP ha demostrado su disposición con los consensos logrados entre Gobierno y agentes sociales en materias como la subida del salario mínimo o la equiparación salarial de las fuerzas de seguridad.

En varias ocasiones ha admitido Maíllo que la protesta de los pensionistas es "legítima" porque es "normal" que cuando la economía vuelve a crecer los distintos colectivos reclamen mejoras, pero ha insistido en que es necesario un debate "serio y sosegado", que no sea "cortoplacista" ni busque el "aplauso fácil".

Tras advertir al PSOE de que cada vez que sale a la calle el que gana es Podemos, ha recordado también que, a la hora de plantear mejoras, el Gobierno no puede "gastar a lo loco" y tiene que pensar en sus compromisos con Europa, especialmente el de estabilidad presupuestaria.