El jefe de la unidad de emergencias deCruz Roja española, Íñigo Vila, ha afirmado hoy que el primer objetivo del hospital de campaña que han montado para recibir a los 60 migrantes que desembarquen del Open Arms será rebajar su "incertidumbre" y su "ansia", tras tantos días de travesía.
Así lo ha asegurado en declaraciones a la prensa en la terminal de cruceros del puerto de Barcelona, donde Cruz Roja ha desplegado un operativo con 70 técnicos, cinco vehículos de apoyo y dos ambulancias.
Vila ha recordado que las 60 personas rescatadas en aguas internacionales frente a las costas de Libia -entre ellas, cinco mujeres y cinco menores, tres de ellos no acompañados- "en principio presentan un buen estado de salud", pues han sido atendidas en el barco por tripulación de salvamento marítimo.
Ha detallado que a los migrantes, cuando pisen tierra, se les dará "información muy básica" de cuáles son los primeros pasos administrativos que deberán seguir, aunque sin generarlos "agobio", debido a su ya de por sí difícil situación.
En caso de que a bordo hubiera mujeres embarazadas, éstas serían trasladadas rápidamente a un centro hospitalario por precaución, mientras que el resto de personas pasarán por un primer triaje -en el que se estudiará si necesitan algún tipo de atención médica- y serán "reseñados" por el Cuerpo Nacional de Policía, ha indicado.
De forma similar se han expresado desde Proactiva Open Arms, pues han indicado que a los desembarcados se les dará "alguna asistencia jurídica que les dé las primeras pinceladas" sobre su situación administrativa.
Ha señalado, así, que el Reglamento de Dublín -que establece los criterios y mecanismos para determinar el Estado miembro de la UE responsable del examen de una solicitud de protección internacional- indica que quienes pidan asilo deben hacerlo en el Estado miembro que pisan por vez primera, por lo que pretender salir de España podría suponerles su devolución a este país.