Un domingo en el que los ciudadanos se convierten en voluntarios, nadando metros para sensibilizar sobre esta enfermedad. Detrás de la campaña está la Fundación contra la Esclerosis Múltiple de Madrid que ayuda a mitigar el dolor de los 6.500 madrileños afectados por esta enfermedad crónica y degenerativa.
Y ¿En qué consiste la prueba? Carmen Valls es directora de la Fundación: “Se trata de batir los metros que se hicieron en la edición anterior. Además vendemos un merchandising, camisetas, por ejemplo, que diseña el antiguo Kukuxumusu, y que a la gente le encantan, e incluso coleccionan”.
El mensaje de Carmen es claro: “Teniendo esclerosis múltiple no hay que renunciar a ser feliz. Estamos ahí para acompañar a los enfermos”. Valls es realista con la esclerosis múltiple, pero a la vez se muestra animada con los últimos avances científicos. “Es una enfermedad grave, pero somos muy optimistas. En los últimos diez años, han aparecido fármacos que ralentizan su evolución, que es lo más importante”.
La esclerosis afecta personas muy jóvenes, cuando están empezando con su ciclo vital. “Perjudica a la persona y todo su entorno, por eso, una vez recibido el diagnóstico, se necesita mucha información. En la Fundación estamos para acompañar a los enfermos” concluye Carmen Valls.