El PP ha tumbado con su mayoría absoluta en el Senado una moción del PSOE con la que este grupo pretendía cerrar la Comisión de Investigación de la Financiación de los Partidos Políticos de la Cámara Alta, que el PP maneja en solitario desde hace un año para indagar las cuentas de las demás formaciones políticas.

La comisión ha sido denostada por los portavoces del resto de grupos políticos, que la han tachado de "show", "comisión de la vergüenza", "espectáculo bochornoso" o "teatrillo", porque en ella el PP no se investiga a sí mismo y la emplea para contrarrestar la comisión que el Congreso dedica a la financiación ilegal del PP.

El grupo socialista ha contado con el respaldo de Unidos Podemos, PNV, PDeCAT, Compromís, Ciudadanos y CC, que han votado a favor de la moción, en tanto que ERC, EH-Bildu y UPN se han abstenido y la mayoría del PP la ha rechazado, junto a Foro.

El senador socialista Tontxu Rodríguez Esquerdo ha reprobado la "farsa" de la comisión del PP, ha pedido eliminarla por "salud democrática", por "dignidad y decencia" y ha reprochado al grupo popular que dé "lecciones de integridad" a otros partidos después de la sentencia del caso Gürtel.

Rodríguez Esquerdo ha aprovechado para subrayar, entre protestas de la bancada popular, que la Junta de Andalucía sí ha colaborado con la justicia en el caso de los ERE, y proclamar que el PSOE de Andalucía no está implicado judicialmente ni ha sido condenado "a título lucrativo" como el PP en la sentencia de Gürtel.

Sin embargo, en nombre del PP, el senador Javier Fernández, ha denunciado la actitud "hipócrita" del PSOE por negarse a que se investiguen sus finanzas cuando al mismo tiempo promueve una comisión "de tintes inquisitoriales" en el Congreso contra el PP.

Ha asegurado que el motivo real de la moción socialista es "intentar acallar la voz del Senado para que no cumpla con su obligación de investigar la financiación de los partidos", y ha insistido en que este grupo quiere cerrar la comisión porque ahora está abordando la "grave trama" de financiación irregular del PSPV en Valencia descubierta por los tribunales.

En todo caso, ha ratificado que la comisión seguirá adelante, aunque los demás no quieran participar, y ha advertido de que la mayoría absoluta del PP servirá para actuar "frente a las tropelías y traiciones de otros", palabras muy protestadas por el PSOE.

Entre los portavoces que han apoyado a los socialistas, la de Unidos Podemos, Pilar Garrido, ha tildado de "auténtica vergüenza" el órgano que el PSOE ha pedido cerrar, y ha acusado a los populares de "desprestigiar" las instituciones con una actitud "revanchista" que es la misma que ahora le lleva a enmendar en el Senado los presupuestos que aprobó en el Congreso tras pactar con el PNV.

El senador de Compromís Carles Mulet ha abogado por "disolver" esta comisión "al igual que todos los partidos corruptos del sistema español" y ha alertado de que el PP utiliza el Senado como "búnker" y "último bastión de la derecha".

Por parte de Ciudadanos, Lorena Roldán se ha referido a la Comisión de Partidos como "la comisión del show" y ha destacado que el PP la creó para no cumplir con el pacto de investidura alcanzado con su partido.

En nombre del PDeCAT, Joan Bagué ha afirmado que el PP la ha empleado como "arma arrojadiza" para ensuciar al resto de partidos, Coalición Canaria la ha atribuido a una acción/reacción del PP para contrarrestar la del Congreso y el PNV han insistido en que la comisión no esté cumpliendo sus objetivos.

El portavoz de ERC, Miquel Àngel Estradé, ha justificado su abstención al asegurar que su partido está dispuesto a acudir a la comisión, si es llamado por el PP, para explicar cómo se financia y cómo ha conseguido no tener ningún caso de corrupción.