Parece que Carles Puigdemont se queda definitivamente en Bélgica. Según una información que ha publicado el periódico L'Eco, el ex Presidente de la Generalitat ha alquilado una casa en la localidad de Waterloo, un municipio que está a unos 15 kilómetros de Bruselas.

Según este diario la villa cuenta aproximadamente con 500 metros cuadrados. Además, tiene seis habitaciones, tres baños uno de ellos con sauna, garaje para cuatro coches y 100 metros de terraza con vistas a un amplio al jardín. La nueva residencia, por cierto, está situada en la avenida del Abogado.

El diario L'Eco asegura que el alquilar de esta casa es de 4.400 euros al mes. Además, dice, el contrato de arrendamiento lo ha firmado Josep María Matamala, conocido empresario que acompaña a Carles Puigdemont desde que llegó a Bélgica el pasado 30 de Octubre.

El municipio de Waterloo está en el sur de Bélgica, en la zona Valona y no en Flandes donde están sus aliados los nacionalistas flamencos.

Hasta ahora, y como han publicado medios francófonos este fin de semana, el líder de Junts per Cataluña se alojaba en el Hotel Husa President Park, cerca de la estación del Norte de Bruselas.

Su partido, Junts per Catalunya (JxCat) ha instado este jueves a ERC a "trabajar con rigor, sin hacer debates públicos innecesarios", y a "no demorar" la investidura del presidente de la Generalitat, tal y como fue "acordada".

Después de que el presidente de ERC, Oriol Junqueras, que permanece encarcelado en la prisión de Estremera (Madrid), haya sugerido un plan B para Carles Puigdemont, combinando una presidencia "simbólica" con otra "efectiva", fuentes de JxCat consultadas por Efe han hecho un llamamiento a la "unidad de acción" y a "trabajar conjuntamente".

JxCat ha instado a ERC a "trabajar con rigor, sin hacer debates públicos innecesarios hasta que se retome el acuerdo de investidura, que contemplaba la elección del presidente del Parlament", el republicano Roger Torrent, "y la investidura del presidente de la Generalitat", con Puigdemont como candidato.

El pasado martes, Torrent decidió aplazar la investidura de Puigdemont, pese a las protestas de JxCat, que ahora exige al presidente del Parlament que "no la demore".

Este jueves, Torrent ha argumentado que el martes, cuando estaba convocado el pleno que finalmente decidió aplazar, "no se daban las condiciones" para que la investidura de Puigdemont fuese "efectiva".