Este miércoles y jueves tiene lugar una nueva cumbre de la OTAN en Bruselas. El Presidente de los Estados Unidos se ha encargado de marcar la agenda con unas polémicas declaraciones en las que ha acusado a Alemania de “estar totalmente controlada por Rusia porque recibe de Moscú entre el 60 y el 70 por ciento de su energía”. Donald Trump ha dicho además que Alemania solo destina el 1 por ciento de su Producto Interior Bruto al gasto militar, algo que no acaba de entender porque es un país rico y podría aumentar mañana mismo la inversión.

Una declaraciones con las que el Presidente de Estados Unidos quiere marcar el ritmo de esta cumbre de la OTAN. Uno de sus objetivos es que todos los aliados aumenten hasta el 2 por ciento su gasto en defensa, algo que hacen muy pocos países en estos momentos. Es un compromiso que todos acordaron en la cumbre de Gales de 2014. España por ejemplo en 2017 se quedó muy lejos de esta cifra con un 0,9 por ciento.

Precisamente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reconocido que “comprende la petición de Donald Trump, de destinar más presupuesto para defensa, eso sí, ha pedido ser justos y tener en cuenta también otros parámetros como la aportación en misiones internacionales”.

Pedro Sánchez ha dicho que "entiende las demandas de la administración americana, pero recuerda que España es un país fiable, comprometido con el vínculo transatlántico y muy activo en misiones internacionales, ya sea en el Báltico, Turquía o Irak".

La cumbre se está celebrado con extraordinarias medidas de seguridad. Más de 2.500 policías y un millar de militares controlan los accesos al nuevo edificio de la OTAN. Esta noche los líderes europeos mantendrán una cena de trabajo en el Museo de Historia de la ciudad en el Parque del Cinquantenaire, conocido parque en el barrio europeo de Bruselas.