El alcalde de León, Antonio Silván (PP), intentará en el pleno extraordinario que se celebra mañana dar todas las explicaciones sobre el contenido de las grabaciones con el empresario José Luis Ulibarri -en prisión por el caso Enredadera- y evitar así una moción de censura que la oposición da por hecho y que, para salir adelante, necesita del apoyo de Ciudadanos.

Este Pleno monográfico se convocó la semana pasada después de hacerse públicas conversaciones del regidor con el empresario José Luis Ulibarri en las que le informaba en tiempo real sobre el resultado de una mesa de contratación ofreciéndole supuestamente información privilegiada.

Aunque Silván no esta investigado por estos hechos, todos los grupos de la oposición los han calificado de muy reprochables éticamente y han considerado insuficientes las explicaciones ofrecidas por Silván tras hacerse pública la grabación.

Así, fuentes de la dirección del PP leonés consultadas por la Agencia Efe dan por prácticamente amortizado el actual equipo de gobierno municipal de Silván, ya que no dudan de que, finalmente y tras el Pleno, el PSOE presentará una moción de censura contra el regidor, que ya cuenta con el apoyo de los ediles de León en Común, León Despierta y UPL.

Como sucedió al inicio de la legislatura, Ciudadanos volverá a ser la llave en el Ayuntamiento leonés. Ya lo fue para que Silván fuera alcalde y lo volverá a ser en la moción de censura, porque el PSOE necesita al menos uno de los ediles de Ciudadanos para conseguir la mayoría necesaria de 14 concejales para que triunfe la moción.

La posición de Ciudadanos sobre la moción quedaría en manos del propio grupo municipal, tal y como se decidió en el último comité autonómico de la formación naranja, celebrado la semana pasada en Valladolid tras hacerse públicas las escuchas del caso Enredadera.

La portavoz municipal de Ciudadanos, Gemma Villarroel, ha mantenido que primero dará una oportunidad para que el alcalde se explique y convenza, dejando la puerta abierta a "cualquier opción".

Se da el caso que Ciudadanos también se ha visto salpicado por la trama en concreto en la figura de su diputado provincial, Juan Carlos Fernández, y Sadat Maraña, cargo de confianza de la formación en la Diputación Provincial de León, ambos en libertad con cargos en el marco del caso Enredadera.

Otra posibilidad que se ha planteado desde Ciudadanos sería la dimisión del propio alcalde y que otro concejal del equipo de Gobierno del PP lo sustituyera con el objetivo de completar los nueve meses que quedan de legislatura.

Esta posibilidad, según las mismas fuentes consultadas, sería improbable, ya que el sucesor natural de Silván, el edil Fernando Salguero, también aparece en los papeles de Enredadera, mientras que el concejal José María López Benito ya dimitió de sus responsabilidades por estar siendo investigado en la misma trama.