La expresidenta madrileña Esperanza Aguirre se ha mostrado “conmocionada” tras la detención este miércoles del que fuera su mano derecha, Ignacio González en una operación contra la corrupción en la gestión del Canal de Isabel II en la que en total han sido arrestadas doce personas.

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La actual portavoz municipal del PP en Madrid ha reconocido que si se demostrara que las acusaciones contra Ignacio González fueran ciertas, supondría un “mazazo enorme”. “Le he dado mi confianza durante muchos años”, ha afirmado. “Para alguien como yo, que nadie discute que me haya llevado un duro, son momentos difíciles”, ha añadido.

"Estoy absolutamente conmocionada"

Esperanza Aguirre ha aclarado que en 2013, cuando se produjo la compra de la empresa brasileña Emissao Engenharia e Construçoes, “ya no estaba en el gobierno de la Comunidad”. Según una denuncia presentada este mismo año por PSOE, Podemos y Ciudadanos, la empresa Emissao se compró por 21,4 millones de euros, un mes después su patrimonio neto era de 10,6 millones y otro año después tan solo de 5,3 millones.

¿Si se confirmaran las acusaciones, tomaría alguna decisión al respecto? “ Cuando haya alguna información podré contestar”, ha zanjado.

Precisamente este jueves Esperanza Aguirre declara como testigo en el juicio de Gürtel. En principio, solo tendrá que responder sobre las prácticas de fraccionamiento de contratos en la Comunidad de Madrid. Fue ese el motivo por el que el tribunal de Gürtel accedió a la petición de las acusaciones de llamarla a declarar y "no por su condición política".

Aguirre será la primera de una serie de altos cargos o exaltos cargos del PP que declarará como testigo en el juicio, pues también están citados Javier Arenas, Francisco Álvarez Cascos, Ángel Acebes, Rodrigo Rato y Jaime Mayor Oreja.