El vizcaíno, quien el pasado domingo terminó en cuarta posición el prestigioso Masters de Augusta, manifestó en rueda de prensa su deseo de unir su nombre al de sus compatriotas Antonio Garrido (1972), Severiano Ballesteros (1981, 1985 y 1995), Sergio García (2002), Álvaro Quirós (2010) y Miguel Ángel Jiménez (2014) en el palmarés del torneo, perteneciente al Circuito Europeo.

"Este torneo lo ha ganado gente que forma parte de la historia del golf español y me encantaría añadir mi nombre", confesó Jon Rahm, cuarto clasificado en el ránking mundial.

Recién llegado de Augusta, el joven jugador vasco reconoció sentirse "cansado" y con "jet lag", aunque advirtió que hará "todo lo posible" para salir campeón el domingo. "No he venido de vacaciones, he venido a ganar un torneo y los torneos me los tomo muy en serio. Voy a hacer todo lo posible para jugar bien porque para eso he venido", aseguró durante su comparecencia ante los medios de comunicación, de casi una hora de duración.

"Ganar un grande es complicado". "Yo conseguí mi objetivo, que era estar en los nueve hoyos finales con opciones de ganar. Me faltaron cuatro golpes", valoró Jon Rahm.

Jon Rahm insistió en que capturar el título en este Abierto de España es su deseo, más teniendo en cuenta su brillante historial en categorías inferiores. Fue campeón de España en categoría cadete (2009), júnior (2010 y 2012), sub-18 (2010 y 2012) y absoluta (2014 y 2015), y quiere volver a ganar en su país, ya "como profesional".

"Ser campeón del Open de España es un objetivo para mí. Es algo importante. Me encantaría llegar a cerrar ese círculo en el torneo porque he tenido la suerte de ser campeón de España desde cadete hasta absoluto y, ahora que puedo jugar este torneo como profesional, me encantaría ganar el título", recalcó.

Rahm explicó, no obstante, que la meteorología será decisiva. "El resultado va a depender del tiempo. Con buena temperatura y sol habría que llegar a -20, pero eso no va a pasar. Va a hacer viento, va a hacer frío y va a llover", anunció.

Tratará de compensar las inclemencias del tiempo con la ilusión y la motivación que le proporciona su regreso al Centro Nacional de Golf, donde entrenó durante dos años, antes de su marcha a los Estados Unidos para estudiar en la Universidad de Arizona State. "Aquí he pasado mucho tiempo, no solo cuando estuve en la Blume sino también con el equipo nacional. Es un orgullo volver", señaló.

Considerado el gran favorito en esta edición, dada su cuarta posición en la clasificación mundial tras los estadounidenses Dustin Johnson, Justin Thomas y Jordan Spieth, Jon Rahm indicó que eso "no es ningún peso sino una motivación".

"No siento responsabilidad. Lo que quiero es ayudar al golf español a que mejore. Ojalá haya más campos, más licencias y más campeones, incluso mejores de lo que yo pueda ser", apuntó antes de reparar en que "cuando estaba entrenando en la Blume como amateur" le hubiese gustado que "hubiese un Open de España con alguien a quien seguir". "Me hace feliz que la gente me pueda ver", sentenció el último ganador del CareerBuilder Challenge.