Se llama Javier, tiene 46 años, es de Valencia y es... campeón del mundo de Mentalismo. Se alzó con este título en el pasado Festival Internacional de Sociedades Mágicas, celebrado en Corea del Sur, donde fueron más de 4.000 participantes. Es el primer español que gana en esta especialidad, y ha explicado en 'Fin de Semana' por qué lo hizo: "Fui muy transgresor".

ESCUCHA LA ENTREVISTA AL CAMPEÓN DEL MUNDO DE MENTALISMO, JAVIER BOTÍA, EN 'FIN DE SEMANA'

Javier Botía, que ya fue campeón de España en 2016, ha vencido el trofeo mundial en Psicometría: "La capacidad de poder localizar objetos o personas mediante técnicas que no implican los sentidos habituales", explica en COPE. En su caso, "localicé colores a 5 personas que subieron al escenario, eligieron un color y lo escondieron. Yo pude decir qué color escondía cada uno de ellos sin acercarme a ellos de ninguna manera". Y la gente, los casi 4.000 espectadores, alucinaron.

El flamante campeón dice que ganó porque aunó espectáculo y sentido del humor: "es la clave". "He puesto por primera vez sentido del humor al mentalismo", señala, y compara su trabajo con el de -con respeto y admiración- Anthony Blake:  "Siempre vestido de negro, con ojeras, voz grave, trasmitiendo misterio, que da un poquito de miedo... Creo que ya tocaba buscar el sentido del humor haciendo hipnosis o leyéndole la mente a alguien", subraya.

"Entre lo mágico, lo científico y lo esotérico"

Botía ha explicado que la parte mágica, "los trucos", comparte escenario con la "real y científica". Se refiere a la hipnosis, a la programación neuro-lingüística (PNL), al lenguaje corporal. Por eso indica que "estamos entre dos aguas: entre lo mágico y lo científico, y si me apuras, lo esotérico".

El mentalista ha puesto ejemplos de diferencias, por su experiencia, entre las mentes de hombres y mujeres: "Una mujer te puede decir exactamente lo contrario de lo que ella está pensando sin ningún tipo de reparo. Un hombre es peor: lo que te dice no lo ha pensado".

También, como especialista en lenguaje no verbal y PNL, es bueno analizando los discursos políticos: "Tienen una capacidad brutal para trasmitir exactamente lo que quieren, que no tiene que ver con lo que piensan". Según Botía, si un representante público lleva una corbata roja quiere expresar "contundencia"; si es azul, "veracidad".