Ha trabajado esta mañana como un día cualquiera, en la Delegación de Fomento de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha en Guadalajara. La próxima ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha asegurado a COPE que afronta el nuevo cargo “con muchísima ilusión, con sentido de la responsabilidad y con respeto porque estamos hablando de palabras mayores”. Llega a un ministerio, afirma, en el que los españoles, los trabajadores y los pensionistas, tienen puestas muchas expectativas. La materia la conoce bien porque se ha encargado de los temas de Seguridad Social y Pacto de Toledo dentro de la Ejecutiva del PSOE.

Deja claro que su primer objetivo es “recuperar totalmente el diálogo social”, con sindicatos y los empresarios porque tiene por delante retos importantes como crear más y mejor empleo, cerrar la brecha salarial y sobre todo afrontar el problema de las pensiones. Afirma que hay que encontrar “cuanto antes un pacto en materia de pensiones que dé tranquilidad, confianza, certidumbre y esperanza” a los jubilados actuales y a los del futuro.

Para eso Valerio ya pedido dinamizar al máximo el Pacto de Toledo en el Congreso. Ve necesario “unas pensionistas dignas, adecuadas y revalorizadas”. Deja claro que el PSOE “es partidario de garantizar el poder adquisitivo de las prestaciones”. Con un déficit de la Seguridad Social por las nubes, por encima de los 18.000 millones de euros, la nueva ministra de Trabajo reconoce que “habrá que reforzar el sistema con ingresos tributarios”. En su día ya propuso la creación de impuestos para financiar las pensiones, entre ellos el de la banca.

Valerio nunca ha sido partidaria de la actual reforma laboral, tampoco de la del sistema de pensiones. Hoy, admite, es pronto para hablar de qué va a pasar con ellas.