Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, la magistrada de guardia ha impuesto al acusado una orden de alejamiento y la prohibición de comunicación con la víctima mientras se investiga un delito de abuso sexual, al tiempo que ha ordenado diligencias al Instituto de Toxicología.

Los hechos ocurrían en la tarde del pasado jueves en la facultad de Óptica de la Universidad de Murcia durante una fiesta universitaria, y poco después eran denunciados a la policía y al lugar se desplazaban varios agentes.

Durante todo el día de ayer agentes de la Unidad de Familia y Atención a la Mujer de la Policía Nacional tomaron declaración a la víctima y a testigos en la comisaría de Murcia, al tiempo que se inspeccionaron las cámaras de seguridad de la facultad donde se produjeron presuntamente los hechos.

La detención del joven se produjo anoche y fue llevado a las dependencias de la comisaria de Murcia para tomarle declaración, donde ha pasado la noche hasta que esta mañana a primera hora ha sido trasladado a dependencias judiciales.