La Audiencia Nacional ha dejado hoy visto para sentencia el juicio a 25 personas vinculadas a la mafia rusa Tambovskaya, entre ellos un diputado de la Duma, y en el que nueve acusados siguen huidos de la Justicia, incluidos los principales cabecillas, Gennadius Petrov y Alexander I. Malyshev.

Con la última palabra de 12 de los 16 acusados presentes, la sección tercera de lo Penal ha celebrado la última sesión del juicio, que comenzó el pasado mes de febrero y en el que la Fiscalía ha intentado demostrar que todos los encausados ayudaron a blanquear el dinero procedente de las actividades criminales de la mafia.

Durante la jornada de hoy, la mayoría de los acusados han ejercido su derecho a la última palabra, se han declarado inocentes y han confiado en la independencia de la Justicia española y en que el tribunal se basará en las pruebas que obran en la causa para dictar una sentencia que, esperan, sea absolutoria.

Incluso Reznik, expresidente de la Comisión parlamentaria de instituciones de Crédito y Mercados de la Duma, ha confesado que se pensó mucho si venir o no al juicio, pero finalmente tomó la decisión porque confía en que "los tribunales españoles son independientes y no influenciables externamente".

Su mujer, Diana Gindin, ha explicado que sus valores y moral van en contra de los delitos que se le atribuyen y ha precisado que nunca se imaginó estar acusada en un procedimiento como este: "Si hace 12 años me hubiesen dicho que iban a acusarme de pertenencia y blanqueo me habría reído y habría dicho que era más probable que me cayese un asteroide en la cabeza".

Por su parte, Ignacio Urquijo (abogado de Malishev), visiblemente emocionado en algunos momentos de su exposición, ha hecho referencia a las supuestas amenazas que el fiscal José Grinda ha recibido de un miembro de la mafia.

"No le deseo nada malo a pesar de las diferencias. Él ha tratado de probar mi inculpabilidad y yo siento en lo más profundo de mi ser mi inocencia porque todos mis actos estaban basados en mi buena fe y en el absoluto desconocimiento a estas organizaciones a las que yo jamás he pertenecido y jamás perteneceré", ha sostenido.

Los 16 acusados que han estado presentes en el juicio se enfrentan a peticiones de entre 1 año y 7 meses y 5 años de cárcel por los delitos de asociación ilícita y blanqueo de capitales, siendo la más alta la del diputado Reznik.

El ministerio público les rebajó las penas el pasado lunes, si bien aseguró que no iba a modificar la petición de condena para los huidos: 8 años y medio para Petrov, Malishev y su mujer, Olga Solovyeva, y 5 años y medio para el resto.

El juicio comenzó con dos acusados más en el banquillo, si bien la Fiscalía retiró la acusación para uno de ellos y el tribunal decretó el sobreseimiento de la causa para otro.