La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha visto "buena disposición" por parte de sindicatos y patronal para llegar a un acuerdo para "retocar" varios puntos de la reforma laboral, algo en lo que espera lograr también consenso político.

Unas declaraciones de Valerio, tras la reunión mantenida hoy en La Moncloa junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con los líderes de la CEOE y Cepyme, Juan Rosell y Antonio Garamendi; y los de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo.

Valerio confía en lograr en esta legislatura "un gran acuerdo en materia de pensiones" y en "cuestiones esenciales" del estatuto de los trabajadores, siempre con consenso, porque el Gobierno "es consciente del terreno que pisa y del lugar que ocupa".

En este sentido, la ministra ha comentado la "aritmética parlamentaria" que tiene el grupo socialista, al que le "encantaría tener los 202 diputados que tuvo Felipe González" en 1982, algo para lo que "va a trabajar".

En la reunión, los agentes sociales han abordado el acuerdo salarial que negocian, que contendrá otros asuntos para los que buscan un consenso tripartito con el Gobierno, ha dicho la ministra.

Estos asuntos versan sobre la necesidad de alcanzar un nuevo modelo de formación, aprovechar las posibilidades de las mutuas y abordar cambios en la legislación laboral como la subcontratación, la ultraactividad y la prevalencia de los convenios, el contrato relevo, la flexibilidad en caso de ERE.

También quieren trabajar en medidas para evitar el exceso de temporalidad, que Valerio ha considerado "un problema grave y endémico", así como en el fraude en la contratación a tiempo parcial o los falsos autónomos, para lo que quiere reforzar la inspección de trabajo y de Seguridad Social con mayores recursos humanos y materiales.

La ministra de Trabajo también se ha comprometido a atajar la economía sumergida, que supone "competencia desleal", los riesgos laborales y trabajar por la igualdad de género, con medidas para mejorar la conciliación, la racionalización de horarios y la incorporación o reinserción de la mujer al mercado laboral.

En relación a las pensiones, ha indicado que los agentes sociales están de acuerdo en adoptar medidas para incrementar los ingresos del sistema y "racionalizar y reordenar los gastos", de forma que sólo se paguen con cotizaciones las pensiones contributivas, generando más empleo y de mejor calidad e incrementando los salarios.

En este sentido, la considerado que el acuerdo para elevar el SMI hasta los 850 euros mensuales en 2020 "fue muy positivo" y ha confiado en que las negociaciones salariales de patronal y sindicatos "lleguen a buen puerto" con un incremento que implique mayor cotización.

La ministra ha asegurado que el Gobierno debe adoptar otras medidas para incrementar los ingresos del sistema vía presupuestos generales del Estado, con el impuesto a las entidades financieras, con la tasa google o incluso "con imposición general".

Ha comentado también que las reducciones de cuotas y las tarifas planas suponen una merma de los ingresos de la tesorería de la Seguridad Social, por lo que el Gobierno está estudiando llevar a cabo transferencias del Estado al sistema de pensiones para compensar esa pérdida de recaudación.

Asimismo, llevará a cabo un estudio "en profundidad" de la utilidad y eficiencia de todas las bonificaciones, reducciones y tarifas planas que existen en la actualidad.

"Creo que están las bases sentadas" para llegar a un acuerdo, propiciando el dialogo social y el consenso en el Pacto de Toledo", ha dicho la ministra.

En la reunión, también han abordado la recomendación 2, la relativa a la subida de pensiones y mantenimiento del poder adquisitivo, y ha señalado que "hay una cierta unanimidad" en vincular los incrementos al IPC, salvo en momentos difíciles para la economía, en los que se podrían introducir otras variables como salarios o PIB.