El Puerto de Barcelona ha reforzado su servicio de autobuses y ha aumentado el número de vehículos que operan y su tamaño para paliar los efectos de la huelga de taxistas, iniciada hoy y que continuará mañana, y que esta no afecte a los usuarios de la instalación portuaria catalana.

El director general de Puerto de Barcelona, José Alberto Carbonell, ha dicho en una rueda de prensa informativa para presentar resultados de la entidad, que "se ha activado un plan de contingencia, ya previsto para estos casos", que también permanecerá activado mañana.

Carbonell ha precisado que el puerto acoge hoy cinco cruceros, dos de ellos con "operaciones grandes de origen-destino", hecho que provoca un aumento en la demanda de taxis, que se mantendrá mañana con la llegada de dos cruceros más.

En consecuencia, se ha incrementado un 50 % la frecuencia y el tamaño de los autobuses que trasladan a los cruceristas de la zona portuaria a sus respectivos destinos, así como la franja horaria en la que operan los servicios de atención.