La Fundació Barcelona Comerç, que está formada por 22 ejes comerciales de la ciudad, ha mostrado hoy su "preocupación" por la situación de "colapso" que vive Barcelona como consecuencia de la huelga del taxi, y ha advertido de las "consecuencias negativas sobre la actividad comercial y la imagen de la ciudad".

En un breve comunicado, esta fundación se ha referido así a la huelga indefinida del colectivo de taxistas de Barcelona para exigir que se ponga coto a las nuevas licencias de alquiler de vehículos con conductor, las llamadas VTC.

"Desde la Fundació Barcelona Comerç compartimos el posicionamiento contra el intrusismo y por esto pedimos atención y propuestas urgentes que faciliten una solución a la movilización del sector del taxi", asegura la nota.

De igual forma que piden soluciones al problema de los taxistas, los comerciantes recuerdan que su sector también se ha visto obligado a "convivir cada día con la venta impune de productos ilegales y falsificados, la competencia desleal y la actividad de muchas plataformas digitales que en muchos casos pagan sus impuestos fuera del país".