Después de dos sesiones de duros ajustes por miedo a los efectos de la guerra comercial, las bolsas españolas han arrancado la sesión de hoy sin rumbo definido, incapaces de aprovechar la mejor cara de Wall Street. 

Los principales indicadores estadounidenses cerraron ayer con avances, animados  por el récord marcado por Apple que ha superado una capitalización de un billón de dólares tras la presentación de sus cuentas. Este dato ha servido al menos para distraer a los inversores de los temores por las últimas fricciones comerciales. En este contexto, el índice Ibex 35 ha comenzado la jornada con una tímida ganancia del 0,1 por ciento, aunque pronto se ha desfondado de nuevo hacia los números rojos para deambular por debajo del nivel de los 9.690 puntos con los que cerró ayer.

Entre los valores del selectivo, las miradas se centran en IAG. La aerolínea ha ganado 835 millones de euros al cierre del primer semestre, un 25 por ciento más que en igual período del pasado ejercicio, a pesar de la erosión sufrida por la huelga de los controladores franceses en ese tiempo. Con todo, los resultados no han gustado a los mercados. Las acciones del grupo hispanobritánico se desploman un 2,8  por ciento en los primeros compases del día. Atención también a Bankia después de que Société Génerale haya mejorada su recomendación de vender a mantener. La entidad sube un 0,1 por ciento, lastrada por la tónica negativa del mercado.

Del lado macroeconómico se esperan una importante batería de indicadores de actividad PMI e ISM en Europa y Estados Unidos, aunque el foco de atención se centrará en los datos de empleo en el país americano. Los expertos prevén que la tasa de paro se mantenga en el 3,9 por ciento, niveles de pleno empleo tras las excelentes cifras arrojadas en estos días por la encuesta ADP de creación de empleo privado.

Pendiente de estos datos, el euro se muestra débil y ha perdido el nivel de 1,16 dólares en el inicio de la sesión. El precio del crudo Brent, entre tanto, se mantiene estable sobre los 73 dólares recuperados ayer en medio de un tira y afloja por las tensiones geopolíticas provocadas por un lado por las maniobras militares de Irán en el Golfo Pérsico y, por otro lado, por el aumento de las reservas en EEUU y las intenciones de Rusia de aumentar sus cuotas de producción.