El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha mostrado hoy su preocupación por el incremento del objetivo de déficit al 2,7 % del PIB (frente al 2,2 % anterior) anunciado por el Gobierno.

En la presentación de un informe sobre Tributación Empresarial, el presidente de la patronal se ha preguntado que "si en los momentos en los que hay crecimientos del PIB y del empleo no somos capaces de reducirlo a cero, ¿qué pasará cuando esos números positivos vayan a peor?".

Ha alertado de que en el futuro las variables económicas se verán afectadas por factores externos como los tipos de interés, que "ya han bajado todo lo que tenían que bajar y ahora empiezan a subir", el precio del petróleo o las incertidumbres de la economía mundial, como el proteccionismo.

Para mejorar las cuentas, Rosell ha abogado por incrementar los ingresos, combatiendo la economía sumergida (que representa entre el 20 % y el 25 % del PIB, unos 180.000 millones de euros) y reducir los gastos vinculados a "las bolsas de despilfarro" de las Administraciones.