Un colgante de hueso hioides con 28 líneas grabadas encontrado en el yacimiento de Altamira es la inspiración de la muestra "Territorio de luz" de la artista Arancha Goyeneche (Santander, 1967), en la que explora la presencia de la mujer en los objetos simbólicos creados en la Prehistoria.

La muestra, inaugurado hoy en el Museo de Altamira, también reflexiona sobre los posibles métodos de cálculo y registro prehistórico sobre la cadencia de los ciclos lunares, estacionales, tanto de la naturaleza como de la mujer, así como sobre los cambios de color y luz del territorio circundante a la cueva.

Para ello, la artista ha establecido nexos entre el perfil del primitivo acceso a la cuevas y las líneas grabadas en el hueso hioides con su singular método de trabajo mediante el uso de vinilos adhesivos para componer registros o melodías rítmicas y cromáticas desde una visión contemporánea.

"Territorio de luz" da continuidad a una serie de exposiciones de mujeres creadoras inspiradas en Altamira que en 2015 ya trajo a Sara Morante con "No era guapa, era peor", en 2016 a Concha García con "La sala de no ser" y en 2017 a Teresa Correa con "¿Acaso me nombras".

La exposición se ha inaugurado hoy con motivo de la celebración del Día de la Mujer por parte de la directora general de Igualdad, Alicia Renedo, y de la directora del Museo de Altamira, Pilar Fatás, y permanecerá expuesta hasta el próximo 3 de junio.

Según la artista, su instalación representa el paisaje observado desde la boca de la cueva de Altamira, presente mediante el mural de casi quince metros pintado en vinilo y fluorescentes, de forma que centra el interés del espectador en el lugar como espacio habitado y su relación con el territorio en el que se ubica.

En un encuentro con periodistas, Goyeneche ha detallado que sus pinturas expandidas muestran un recorrido simbólico y personal desde la abstracción, la luz y el territorio del País de Altamira, enfatizados por los matices cromáticos de las piezas fruto de la observación y de la medición de las estaciones.

Pero más allá de este paisaje y del propio territorio, la artista explora la presencia de la mujer en los objetos simbólicos creados por las comunidades de cazadores-recolectores en el inicio de nuestra Historia.

Respecto a la inspiración de "Territorio de luz", la artista ha destaca los colgantes fabricados hace 18.000 años sobre hueso hioides de caballo, decorados con series de 28 incisiones grabadas en sus bordes que, a su juicio, nos remiten a los ciclos de la Naturaleza, al vínculo natural con lo femenino, y a la mujer.

En la inauguración de la muestra, Fatás ha asegurado que la exposición se enmarca dentro de los actos que la institución celebra en torno al Día Internacional de la Mujer y que se completará este domingo con la visita teatralizada "Nosotras".