El director general de Industrias Culturales y del Libro, Óscar Sáenz de Santa María, ha anunciado hoy la creación de un Código de Conducta Voluntario para crear acuerdos con el sector privado -Google, publicistas u operadores- con el objetivo de "ahogar económicamente" a los piratas.

"En la lucha contra la piratería no solo existe el bloqueo, también tenemos otra llamada'Follow de money', es decir, cómo puedes ahogar una página pirata, pues evitando que tenga dinero, que tenga recursos. Y una de esas vías es evitar que la publicidad vaya a esas páginas", ha dicho a Efe Sáenz de Santa María al término de la presentación del Observatorio de la Piratería presentado hoy en la Secretaría de Estado de Cultura.

Un nuevo código -con cero coste para el Estado, que ya en las manos del conjunto de operadores y de la Coalición de Creadores con el objetivo de "pulir el texto y llegar a algo que le satisfaga a todos".

Así, y según ha detallado Sáenz de Santa María, el Código de Conducta tendría el siguiente recorrido: "a través de acuerdos entre los sectores privados, el titular de derechos avisa de que sus contenidos están siendo vulnerados, el operador del sistema entiende perfectamente esa situación, y el publicista entiende que no debe financiar esas páginas web".

Y es precisamente el sector de la publicidad a quien desde la Secretaría de Estado de Cultura quieren "meter en el barco" como uno de los actores protagonistas del acuerdo.

"Creemos que lo vamos a hacer porque en nuestras actuaciones en la Sección II de Lucha contra la Piratería hemos visto que cuando anunciamos el inicio de las actuaciones contra una web los propios publicistas retiran la publicidad. Con lo cual ellos ya han mostrado una voluntad antes de la creación de este tipo de acuerdos", ha expresado.

"Se puede enganchar con medidas de propio bloqueo o medidas de no prestar servicios y en eso es en lo que estamos trabajando, que los distintos operadores puedan no prestar servicios a páginas que son piratas", ha puntualizado.

Este nuevo sistema de lucha contra la piratería se ha inspirado en el que ya existe en Portugal aunque el nuestro tendrá matices ya que la medida de bloqueo que se aplica en el país vecino en España es "discutible jurídicamente".

En Portugal sus sistema judicial bloquea una página al detectar la existencia de contenidos legales, sin embargo en España, con la existencia de "un sistema más garantista", primero se solicita a esa web que retire el contenido ilegal, y de no cumplirlo se efectúa el bloqueo.

Un mecanismo que, con el que para el director general de Industrias Culturales y del Libro, consigue el "mismo efecto" que el bloqueo.

En cuanto al intervención administrativa, Sáenz de Santa María ha indicado que el Estado actuará como una "especie de supervisor" que otorgará "un sello de calidad" a todos los que se sumen a este Código de Conducta que permita lucir que están luchando contra la piratería.

Pero también quiere "lograr" que las páginas web que ya se han identificado como piratas "puedan ser publicadas desde las administraciones públicas". EFE/