La actuación se inició dentro del plan de seguridad global de las personas que la Guardia Civil tiene establecido. De las investigaciones realizadas, los agentes lograron identificar a un varón que había violado a una menor en Rumania. Continuando con las gestiones los guardias civiles comprobaron que esta persona se encontraba reclamada por las autoridades de Rumania y sobre él pesaba una orden europea de detención y entrega. El autor había sido condenado por las autoridades judiciales de Rumania por la violación de una menor de 16 años, así como por delitos de pornografía infantil y contra la seguridad vial, por lo que los agentes procedieron a su localización y detención. El detenido junto con las diligencias fueron puestos a disposición del Juzgado Central de Instrucción nº4 de la Audiencia Nacional de Madrid.