Una jueza brasileña ha ordenado la suspensión del partido amistoso entre Brasil e Inglaterra programado para el próximo domingo en el Maracaná por falta de seguridad en el estadio, que está aún en obras, informaron fuentes oficiales. La jueza Adriana Costa dos Santos tomó esa decisión porque el entorno del estadio está aún en obras y considera que podría generar peligro para los aficionados. Este Brasil-Inglaterra es el primer partido oficial que ha sido programado en el estadio que albergará la final de la Copa Confederaciones, el próximo junio, y del Mundial de 2014. La gobernación de Río de Janeiro anunció que va a recurrir la decisión y explicó que, "por un fallo burocrático", no se envió el informe de seguridad de la policía a la Federación de Fútbol de Río de Janeiro.