España sigue siendo el destino preferidos de los españoles. Da lo mismo que la economía esté bien o que haya crisis. Es una cuestión de principios, no de dinero. O al menos así lo parece a tenor de los datos del Instituto Nacional de Estadística que recoge la Encuesta de Turismo de residentes. Durante el pasado año, los ciudadanos españoles realizaron un total de 193,7 millones de viajes, de los que 17,28 millones tuvieron como destino algún lugar fuera de nuestras fronteras.

La estación preferida para viajar es el verano. Es en esa época del año cuando el porcentajes de españoles que viajan se acerca más a la frontera del 10%. El último verano se realizaron 66,99 millones de viajes, pero sólo 6,3 millones tuvieron como destino final un país extranjero: el 9,8% del total. ¿Por qué no se viaja al extranjero? Puedes verlo en este vídeo. 

Los españoles gastaron en viajes en 2017 nada menos que 44.233 millones de euros. De esta cantidad, 29.957 millones se realzaron en España y 14.275 millones, en el extranjero. Aquí el peso del turismo exterior gana peso: los gastos realizados fuera representan el 32,27% del total, tres veces más que su número.

Pero, en lo que verdaderamente gastan los españoles -fuera y dentro del país- es en bares y restaurantes. En 2017, el gasto suntuario alcanzó los 10.478 millones de euros, cinco euros más que los gastos en transportes, tal y como asegura el Instituto nacional de Estadística. En España, la cifra subió el pasado año hasta los 8.025 millones de euros, un 26,8% del total. Es el primer gasto, por encima del alojamiento (7.017 millones y un 23,4%) y el transporte (6.475 millones y un 21,6% de peso).