A pesar de que los oscenses tan solo han ganado un partido de los cuatro que han jugado –hay que recordar que al ser impares en la liga siempre descansa uno-, esa victoria llegó en su último encuentro disputado ante Leyma Basquet Coruña (83-73), algo que deja claro que la evolución de la plantilla va por buen camino y que para nada va a ser fácil superarlos, y menos en su mítica pista. Tal y como afirma Francis Tomé, “creo que es el segundo equipo más joven de la competición después del nuestro. Está formado por una serie de jugadores jóvenes que tienen ese hambre de haber estado algún año en LEB Oro o ser jugadores de selección española y todavía no haber podido dar el salto al primer equipo que tiene sus derechos en ACB y donde se formaron”. Precisamente ese hambre del que habla el técnico malagueño es lo que quiere para sus jugadores, aunque “quizá somos demasiado jóvenes todavía para sentirlo”. Las semanas transcurren normales por Los Guindos a pesar de no haber conseguido todavía una victoria en los cinco encuentros disputados. Aún así, “nosotros seguimos trabajando con la ilusión de todas las semanas, aunque  es verdad que con mayor preocupación porque no hemos ganado todavía. Intentamos quitar esa presión que tienen los chavales”. De este modo, Tomé afirma que no quiere que “esa presión de no haber ganado todavía se convierta en ansiedad, porque aseguro que mis jugadores son los primeros que están locos por ganar”. El partido ante Peñas Huesca “es igual de importante para nosotros que el resto, es un examen que tenemos cada viernes y para el que nos preparamos concienzudamente durante la semana. No hay ningún partido especial, no preparamos un partido diferente a otro y sólo pensamos en mejorar cada día buscando, por supuesto, ganar el partido que nos toque. Entendemos que perdiendo es mucho más difícil progresar”. El rival de esta semana cuenta con una plantilla plagada de jóvenes promesas en la que sobresale el nombre del base valenciano Josep Pérez. Tras una temporada en la que no pudo brillar ni desarrollar su juego con asiduidad en el FCB debido a las lesiones, el de Lliria está siendo uno de los jugadores importantes del equipo, con una media de cerca de 10 puntos por partido. Jorge Sanz, cedido por el Fuenlabrada, le acompaña en la dirección, aunque es verdad que a Costa le gusta jugar con ambos en la pista en determinados momentos. El equipo es muy parecido en cuanto a estructura al del Clínicas Rincón. Juventud a la bandera y con un “veterano” del año 91 como es Jorge Lafuente, que llega ya tres campañas en la plantilla y se va haciendo su hueco en la categoría. Destacan en la zona exterior otros dos jugadores cedidos por club ACB. Ellos son Darío Brizuela y Edgar Vicedo, ambos del Estudiantes. El club colegial ya cedió a Vicedo a Huesca a mediados de la temporada pasada y viendo la progresión que tuvo junto a un técnico de la categoría de Costa, ha decidido volver a hacerlo y probar también las evoluciones de Brizuela en un equipo sin más presión que la de progresar y pelear cada partido como si fuera el último. Así, Joe Hart llega desde la Liga EBA y completa la nómina de jugadores en el perímetro. En los puestos interiores sobresale Lucas Toutman, quien con 23 años aterrizó en verano en España desde la NCAA (Univ. Elon). En los dos últimos encuentros, 21 y 23 puntos para el americano, que es el líder del equipo en esa posición. El nigeriano Ehimen Orupke, también con experiencia NCAA, estuvo en Murcia el año pasado y no contó con oportunidades. Este año, aunque sí tiene regularidad de minutos, su suerte no está siendo la misma que la de Toutman (3 puntos y 4 rebotes por partido). Alexander Zhigulín, ex del FCB ‘B’, y una de las promesas en la que más esperanzas tienen puestas en el B Sevilla, Maksim Shalam, cierran el grupo de jugadores del Peñas Huesca. Tan solo 10 fichas profesionales, pero con una ilusión y una ambición que es capaz de luchar contra todo y contra todos.