El Rey ha abogado hoy por la cooperación con el Mediterráneo y ha subrayado que "la estabilidad y la prosperidad" europeas "están y siempre han estado estrechamente vinculadas al destino" del norte de África y de Oriente Medio.
Don Felipe ha sostenido que el Mediterráneo "debe ser el espacio compartido de paz, prosperidad y estabilidad que nuestros ciudadanos anhelan", en la inauguración de la quinta edición del World Congress for Middle Eastern Studies (Wocmes), que esta semana se celebra en Sevilla.
Ha añadido que este objetivo "requiere una responsabilidad conjunta, que va más allá de los países del Mediterráneo, porque la estabilidad y la prosperidad de la sociedad europea están y siempre han estado estrechamente vinculadas al destino de los países del Oriente Medio".
La presidenta andaluza, Susana Díaz, ha denunciado por su parte que el Mediterráneo se ha convertido "en un mar de dolor y de sufrimiento" por la muerte de miles de inmigrantes que huyen de la guerra y de la miseria, y ha subrayado que "nuestro deber es no resignarnos ante una situación que millones de hombres y mujeres consideramos dolorosa y vergonzante".