Hague hizo estas declaraciones a la BBC tras confirmarse que dos extranjeros, entre ellos un británico, murieron y varios extranjeros fueron secuestrados en el ataque de ayer contra una instalación en Ain Amenas, próxima a la frontera de Argelia con Libia. "Esta es por supuesto una tragedia. Esta es una situación peligrosa que se desarrolla rápidamente", indicó el responsable del Foreign Office, que ha ordenado el refuerzo de la seguridad de la embajada del Reino Unido en Argel. El ministro agregó que el comité de emergencia Cobra, formado por los principales ministros del Gobierno para evaluar situaciones de urgencia como la de Argelia, trabaja en este caso. Hague afirmó que no hay "excusas" para este ataque pues es una situación "totalmente inaceptable". "Este es un asesinato a sangre fría de gente que trabaja. De modo que no hay excusas, ya sea que esté vinculado a Libia, Mali o cualquier otro lugar", dijo el jefe de la diplomacia británica. En el ataque varias personas resultaron heridas y un número no precisado de extranjeros, entre ellos británicos, japoneses, estadounidenses, franceses y noruegos, fueron secuestrados, según los medios del Reino Unido. La multinacional BP confirmó ayer el ataque contra una plataforma en la localidad argelina de Ain Amenas que opera conjuntamente con la noruega Statoil y la compañía estatal Sonatrach Statoil, Varios medios han indicado de que el ataque puede responder a la decisión de Argelia de permitir que Francia utilice su espacio aéreo para luchar contra los grupos islamistas en Mali, donde las fuerzas galas se enfrentan a militantes vinculados a la red Al Qaeda.