Pasar de alrededor 8000 habitantes a más de 120.000 en apenas unas semanas genera en el cuerpo de seguridad municipal multitud de necesidades para control de tráfico, del control del cumplimiento de las ordenanzas de convivencia, de control de fenómenos como el top manta, pero también registra servicios no delictivos con menores, como extravíos, incidencias relacionadas con la protección civil, actuaciones por conatos e incendios, atenciones a familiares por accidentes o fallecimientos naturales y, fundamentalmente, actuaciones relacionadas con el auxilio a personas.   Concretamente este verano se han registrado 166 avisos, en menos de dos meses, relacionados con el auxilio a necesitados por distintos motivos, pérdida, desorientación, accidentes, enfermos, caídas, encierros involuntarios o intoxicaciones, entro otros. En total casi 200 servicios humanitarios desde el primero de julio, cifra que revela un incremento del 23% con respecto del año.   "El incremento de la presión poblacional exige de nuestra Policía Local un esfuerzo enorme ya que los servicios se multiplican y no todo lo que se hace se ve", así valoraba el edil del área, Alfonso López, la tarea de servicio del cuerpo municipal de seguridad, "una tarea de atención ciudadana y de atención humanitaria menos aparente que otras intervenciones pero tanto o más importante".   La Policía Local de Peñíscola se refuerza cada verano con personal interino de temporada para poder dar cobertura al incremento de servicios, un esfuerzo que la concejalía cifra en alrededor de 100.000€.