La Unión Europea (UE) se despertó hoy con unos resultados electorales que ratifican el avance de los euroescépticos y la irrupción en el Parlamento Europeo (PE) de nuevos actores que han logrado quitar peso a los grandes partidos de los conservadores, los socialdemócratas y los liberales.  La última actualización de los resultados provisionales de las elecciones europeas siguen dando al Partido Popular Europeo (PPE) 212 escaños, mientras que los socialdemócratas suben uno desde anoche hasta 186 y los liberales de ALDE pierden uno hasta 70. Los Verdes mantienen 55 escaños, los conservadores y reformistas suben cuatro hasta 44, la izquierda baja hasta 43, los No Inscritos se sitúan en 38, el grupo europeo de libertad y democracia se queda con 36 y el grupo "otros" con 67.     La Eurocámara estará más fragmentada que la resultante de las anteriores elecciones hace cinco años. Frente a 2009 el PPE ha perdido 62 escaños y los socialdemócratas 10, al tiempo que la tercera fuerza, ALDE ha bajado 13 en comparación con los resultados de hace cinco años. Los Verdes han ganado dos, los conservadores y reformistas han perdido 13 y la izquierda ha aumentado en ocho sus escaños. El partido de libertad y democracia ha incrementado su presencia en siete escaños y los No Inscritos han subido 5 sus escaños. En los No Inscritos está el gran ganador de las elecciones en Francia, el Frente Nacional de Marine Le Pen, que aumenta de 3 a 22 su representación en el hemiciclo de Bruselas y Estrasburgo.     La UE también amaneció con la noticia de que los ultraderechistas del NPD, partido que aglutina a los colectivos neonazis en Alemania y que, pese a estar inmerso en una demanda de ilegalización en el Tribunal Constitucional tras una querella de la Cámara alta (Bundesrat), se hizo con un escaño en la Eurocámara.     En el Reino Unido, el Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), una formación populista que reclama abandonar la UE, ganó las elecciones con cerca del 30 % de los votos y en Grecia el partido neonazi Amanecer Dorado se colocó en tercer lugar.     En definitiva, las fuerzas euroescépticas sumarán en la futura Eurocámara un centenar de escaños, según los resultados de las elecciones europeas.     La estrecha victoria del PPE le obligará a negociar con otras formaciones políticas para que su candidato, el ex primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker, pueda presidir la próxima Comisión Europea (CE).     Los líderes de la UE, que se reunirán el martes para analizar los resultados de las elecciones, tendrán que proponer al PE el nombre del próximo presidente de la CE, "teniendo en cuenta" el resultado en las urnas, pero será la Eurocámara la que respaldarle o rechazarle por mayoría de los 751 escaños.     El presidente saliente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, pidió anoche que los dos grandes partidos sigan encabezando la representación en la Eurocámara.     Otra lectura de las elecciones que se hace hoy la UE es la legitimidad que tendrá la nueva Eurocámara por la baja participación en la elecciones, aunque con el 43,09 % ha sido idéntico a los anteriores comicios.