En el festejo actuaron, de corto, el becerrista sevillano Juan Pedro García “Calerito”, con una vaca de Rego Botelho, y el rejoneador azoreño Rui Lopes, que lidió un novillo de Francisco Sousa, ambos con acierto y lucimiento. Asímismo, ambos astados fueron “pegados” por los forcados juveniles del grupo de amadores de la Tertulia Tauromaquica Terceirense.Una vez concluida la lidia, todos esos niños bajaron al ruedo de la plaza de Terceira para participar en las actividades que propone el espectáculo infantil “Vamos a jugar a toros”, del empresario español Ignacio Ríos.Un encierro, con cohete incluido, que salió desde las afueras del recinto, seguido de la modalidad taurina autóctona del “toro a corda” (toro ensogado) prologaron juegos más concretos ante los carretones.Los forcados juveniles de la Tertulia enseñaron a “pegar” a los más pequeños, al igual que Calerito mostró también las suertes del toreo a varios niños que utilizaron disfraces y trastos simulados en una imaginaria corrida de toros, incluida la suerte de varas, cuya autorización viene reivindicando desde hace años la afición azoreña.Como ya viene siendo tradicional, la Tertulia Tauromaquica Terceirense, organizadora de los festejos taurinos, intenta  fomentar así  la afición taurina entre los más pequeños de la isla, que en gran parte acuden a la plaza desde sus colegios y acompañados por sus propios maestros.