“UPyD no está en horas bajas, nuestros logros están ahí y hemos sido la formación que más ha conseguido en la lucha contra la corrupción, pero no hemos sabido explicarlo”, dice castellano en un ejercicio de autocrítica y ante la pregunta necesaria sobre la crisis que su propia formación política atraviesa sobre todo después de las elecciones andaluzas. Parece no afectarle al candidato: tiene vocación, tiene ganas, tiene formación y ha sido cocinero antes que fraile.” He sido desempleado, becario y precario, autónomo y ahora contratado –es profesor universitario en la Loyola-, sé de qué va la calle y no como aquéllos que en su mayoría sólo se ha dedicado a cambiar de órgano administrativo al de partido para no cambiar nada”. Gran parte de la denominada ‘nueva política’ se caracteriza por el hartazgo de la sociedad de la profesionalización de los políticos lo que ha llevado a que profesionales como castellanos den el paso y se involucren desde un partido como UPyD. ¿Hay algo que cambiar en Córdoba? Para nuestro entrevistado, la banalidad: “Esta es la Córdoba del selfie, de gastronight, del shopping, del postureo en definitiva. El PP ha vendido que somos el Silicon Valley de Sierra Morena” dice Castellanos que se pregunta “cómo revierten de verdad y de manera cuantificada toda esa parafernalia en la ciudad”. UPyD basa su programa en cinco ejes de actuación en lo que destacan la transparencia- “otra mentira del PP, no se pueden consultar las cuentas de Aucorsa, ni Vimcorsa ni Emacsa y eso no es transparencia”- ; la participación que según UPyD “esta abandonada y no se tienen en cuenta los problemas sociales de los barrios”; más social – proponen bonos sociales y facilitar la conciliación familiar- y más europea, recuperando el proyecto de capitalidad cultural. UPyD retoma la idea lanzada el pasado 13 de enero en el Círculo de la Amistad entre los rectores de las universidades para que Córdoba se convierta en la ciudad del conocimiento.