El campeón del mundo de patinaje artístico sobre hielo Javier Fernández ha recibido un caluroso homenaje en Lagartera, municipio toledano de donde es natural su abuela paterna y dos de sus bisabuelos, desde el que ha reclamado la construcción de más pistas de hielo en España. Muy emocionado, se ha bajado del coche nada más pisar el que considera su pueblo, que le ha recibido con un cartel de 'Bienvenido Campeón' y donde le esperaba en primer término su abuela paterna, Carmen Moreno, que ha hecho público su "orgullo e ilusión" por este reconocimiento y asegurado: "el que se acuerden de mi nieto no se me olvidará nunca". El campeón del mundo ha asegurado que "no venía desde que era un bebé, no me lo esperaba", al tiempo que ha recalcado que "soy una persona muy de pueblo" y que "el volver a mis raíces y ver a la gente tan emocionada con mi presencia es muy especial, no se puede explicar". Javier Fernández ha manifestado que después de conseguirlo casi todo (Campeonato del Mundo, tres veces el Campeonato de Europa y otras tres el de España), "el reto es la medalla en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang (Corea del Sur), aunque primero hay que pensar en el Europeo de Bratislava (Eslovaquia) y el Mundial de Boston (EE.UU.), donde toca revalidar los títulos". El deportista ha aprovechado para pedir que se construyan más pistas de hielo en España y dar así oportunidad a los más jóvenes a dedicarse a esta disciplina de forma profesional, aunque ha reconocido que, gracias a su "eclosión internacional", el número de federados en el país se han multiplicado notablemente. Después de vestirse de Supermán o de torero en sus exhibiciones y competiciones, Fernández no descartó vestirse algún día de lagarterano. "Se puede pensar lo de ponerme el traje típico de Lagartera y hacer una exhibición algún día, ojalá", ha declarado entre risas. Acompañado por la organización del evento, la Asociación Amigas del Traje de Lagartera, el patinador madrileño ha visitado el Museo 'Marcial Moreno Pascual', donde ha conocido con detalle los trajes típicos de la localidad, así como la mantelería tradicional que hace a este municipio conocido en el mundo como 'la cuna de los bordados'. El momento más especial se ha vivido cuando este colectivo local y sus familiares le han obsequiado con varios detalles cerámicos y una mantelería artesanal del municipio. Además, el acto se ha iniciado con la proyección de fotografías de la infancia de Javier, así como de sus logros como patinador, incluido el Campeonato del Mundo de Shanghai. El día para Javier Fernández será redondo, ya que esta misma tarde en su otro pueblo, Navalacruz (Ávila), descubrirá una estatua en su honor en una de sus plazas.