La detenida, que trabajaba desde hacía varios años en una conocida oficina de gestión documental de la localidad de Burriana, utilizaba la confianza de su jefe y la de las personas que contrataban los servicios de la empresa, para cobrar dinero en mano diciendo que era para realizar el pago de diversas gestiones de la administración. Sin embargo, se quedaba el dinero, todo ello sin el conocimiento del responsable de la oficina gestora.   Los clientes de la gestoría que pagaron en mano a la detenida recibieron notificación de embargo por parte de la Tesorería General de la Seguridad Social por impago, recurriendo entonces a la gestoría, que desconocía las actividades de la detenida. Las investigaciones por parte de la Guardia Civil se iniciaron a raíz de la denuncia de varios de estos clientes de la gestoría, quienes habían confiado en que la detenida haría efectivos los pagos que le habían confiado.   Como resultado de dichas averiguaciones se comprobó que la detenida nunca llegó a realizar los pagos, y que por el contrario se quedaba con el dinero de los clientes. Así mismo, durante el transcurso de las pesquisas policiales, se ha tenido conocimiento de que varias empresas de la provincia se han querellado también contra la imputada por hechos similares, por cantidades que podrían superar los 70.000 euros. La actuación ha sido realizada por efectivos de la Guardia Civil de Burriana.