La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha pedido que se supriman las Nuevas Generaciones de los partidos políticos porque, asegura Botella, esos jóvenes deberían formarse, estudiar y encontrar un trabajo antes de afiliarse y meterse en políticaReflexión al hilo de las declaraciones de ayer de Esperanza Aguirre en las que exigía que los nuevos políticos lleguen a los cargos públicos habiendo cotizado ya a la seguridad Social. Botella no sólo está de acuerdo con esa reflexión, si no que ha ido más lejos al asegurar que "las nuevas generaciones no sirven de nada y que esos jóvenes deberían estar centrados en formarse".Por cierto que Botella no entendió como una crítica las palabras de Aguirre en las que la presidenta del PP de Madrid decía que la alcaldesa de Madrid lo había hecho bien hasta la tragedia del Madrid Arena.Botella ha presidido hoy una nueva reunión de la junta de gobierno del Ayuntamiento de Madrid donde se ha decidido reducir en un 20 por ciento el número de eventuales en el consistorio de la capital. Se irán a la calle 21 trabajadores, pero la alcaldesa ha querido dejar claro que "todos son personal del equipo de gobierno y que, de momento, no se toca a los eventuales ni de los grupos municipales ni de las juntas de distrito", aunque no lo descarta en un futuro. El motivo: "hacer más eficiente el Ayuntamiento".Una Junta de Gobierno que también ha aprobado un proyecto de ordenanza para cambiar la normativa municipal para regular la denominación de las vías, espacios urbanos, monumentos y edificios municipales. Se trata de introducir más coherencia y lógica a la antigua ordenanza de 1981. A partir de la aprobación de la nueva ordenanza, esta competencia corresponderá únicamente al gobierno municipal y no al Pleno.También se ha dado luz verde al segundo Plan contra la Explotación Sexual que se va a prolongar hasta 2016. Botella ha dado datos del primer plan que acabó en 2012 y donde se atendieron en los diferentes dispositivos municipales a más de 70.000 mujeres, de las cuales más del 60 por ciento pudo dejar la prostitución de manera definitiva.Botella ha querido dejar claro que este plan "no es normativo y que no recoge posibles sanciones a prostitutas o a clientes". Multas que se incluirán en la futura gran supraordenanza de convivencia ciudadana que se está preparando. Lo que sí ha desvelado la la alcaldesa es que, en caso de tener que multar, a alguien ella es partidaria "de que sea a los clientes".Este plan incluye también una novedad: la creación de una red de ciudades Iberoamericanas contra la trata de blancas con el objetivo de estrechar vínculos y esfuerzos entre las ciudades de origen, tránsito y destino de las mujeres explotadas.