Sven Huber, socio fundador de Boolino, ha contado en La Linterna que la idea tiene un doble origen, profesional y personal: “Llevamos muchos años trabajando en el sector editorial. Hemos visto la evolución del sector y somos padres con hijos pequeños”. De ahí surgió la pregunta: “¿Qué hacer para ayudarles a encontrar los libros más adecuados para sus hijos?”.La plataforma cuenta ya con unos 50.000 libros, clasificados “en edad recomendad y una serie de intereses”. Además, están trabajando en un modelo de suscripción mensual. De esta manera, los padres recibirán un libro y una serie de actividades alrededor del mismo para trabajar con sus hijos: Se trata de “crear una ilusión a partir de un libro”.Los socios de la empresa han conseguido un crédito bancario para sacar el proyecto adelante y han tenido ocasión de presentarlo junto a otras propuestas en Silicon Valley.Escucha aquí la entrevista a Sven Huber.