El portavoz parlamentario del BNG, Francisco Jorquera, y la diputada Ana Pontón comparecieron junto al representante del colectivo "Galicia mellor sen touradas", Rubén Pérez, para explicar esta propuesta. Detallaron que para plantear la prohibición de las corridas de toros han tenido en cuenta que cada vez hay más oposición entre los gallegos a este espectáculo que, además, entienden es una práctica que no tiene arraigo y es ajena a la cultura gallega, pese a que se trató de introducir en ese "intento de homologación cultural" que se persigue desde el Estado y desde los sectores "más reaccionarios", dijo Pontón. También tratan de prohibir los toros porque se trata de una práctica "cruenta, anacrónica, un espectáculo basado en el sufrimiento de un animal" e intentan con su propuesta abrir un debate social para conseguir que se erradique una práctica "que no es cultura sino, en todo caso, es tortura". Por su parte, Rubén Pérez reiteró que la tauromaquia "no tiene ninguna implantación" en el territorio gallego, y en los municipios en que se celebran estos festejos, como La Coruña, Pontevedra, Padrón o Sarria, y son subsidiados por ayuntamientos -o por la Diputación, en el caso de Pontevedra- de forma "totalmente escandalosa" ya que no hay afición. Insistió Pérez en que pese a que cada vez va menos público a los festejos de La Coruña y Pontevedra, estos reciben cada vez más subsidios, y destacó la "incongruencia" de que, por ley, no se pueda torturar a un gallo o a un perro y sí a un toro. Por su parte, Francisco Jorquera insistió en la necesidad de asegurar la protección y defensa de todos los seres vivos y evitar un sufrimiento "gratuito" a los animales, y reiteró que en Galicia existe un "altísimo rechazo" social a estos "espectáculos crueles". Además, subrayó, en Galicia no se dan los supuestos que alegan algunos naturalistas de que si no hay toros desaparecería el toro de lidias, ya que en la CCAA no existe ni tradición cultural ni ganaderías. Tras rememorar que Cataluña prohibió las corridas de toros, Jorquera recordó que en Portugal están prohibidos todos los espectáculos con muerte del animal, salvo en un municipio y en Francia solo se permiten en 11 departamentos con tradición y en el resto están prohibidas. En Galicia, "no hay menos motivos" que en Cataluña para prohibir las corridas de toros por ley, concluyó Jorquera.