Alcaldes y líderes políticos soberanistas han arropado hoy al presidente catalán, Artur Mas, en su declaración ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña por el 9N y han defendido las concentraciones ciudadanas frente al tribunal como un ejercicio de la libertad de expresión.En declaraciones a los medios de comunicación frente a la entrada del Palacio de Justicia, el presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha señalado que se ha reunido allí "tantísima gente" para defender "la democracia, las urnas y el derecho de voto de los ciudadanos, y ha asegurado que se mantendrán "firmes" en la defensa de estos compromisos.Por su parte, el cabeza de la lista de Junts pel Sí, Raül Romeva, ha lamentado el "anacronismo" que supone que Artur Mas declare ante el TSJC como imputado "por haber hecho una cosa que le pedía la gente, que era poner las urnas", y ha afirmado que él ha acudido a acompañarlo para sentirse también "inculpado".Tras las críticas del TSJC a estas concentraciones, Romeva ha denunciado que las instituciones judiciales están "más politizadas que nunca".Entre los que han arropado Mas se encontraba también el diputado electo de la CUP Antonio Baños, quien sin embargo no se ha quedado esperando a la salida del president del juzgado.El alcalde de Girona, Carles Puidgemont, presidente de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI), ha explicado que hoy más de 400 alcaldes -entre ellos la de Badalona, Dolors Sabaté- y los presidentes de las diputaciones provinciales han estado "al lado del president" acompañándole hasta el TSJC.Y lo han hecho, según ha dicho, para defender "la dignidad democrática de Cataluña" ante unas imputaciones "inaceptables", negando que esto sea una presión a los tribunales, sino "el ejercicio de la libertad de expresión"El presidente de la Asociación Catalana de Municipios (ACM), Miquel Buch (CiU), también ha expresado la necesidad de defenderse ante un Estado "que lleva ante los tribunales cualquier elemento de democracia y participación ciudadana".Por su parte, el presidente de la Asamblea Nacional Catalana, Jordi Sánchez, ha denunciado que "cuando la Fiscalía del Estado lleva a los representantes del Govern ante el tribunal, la democracia española pierde calidad".En cambio, el presidente del sindicato ultraderechista Manos Limpias, Miguel Bernad, que ejerce de acusación popular contra Artur Mas, ha considerado que esto "no es un proceso político, sino penal" y que lo de hoy le recuerda al "periodo etarra", ya que en su opinión se está llegando a una "situación de golpe de Estado".