El Real Murcia sigue hundido en las profundidades de la clasficación después de cuatro jornadas de competición. El conjunto de Adrián Hernández sólo ha sumado un punto y no consigue remontar el vuelo. En esta jornada los granas han sido víctimas del San Fernando, que llegaba a Nueva Condomina como líder del grupo IV de Segunda B. El técnico grana hizo debutar al central Antonio López para recibir a los andaluces. Prácticamente desde el pitido inicial el equipo de García Sanjuán se ha hecho con el control del balón ante un Real Murcia con pocos argumentos para crear algún tipo de peligro ante la portería visitante. 

El San Fernando buscaba ponerse por delante en el marcador y pronto tuvo sus primera opciones por mediación de Hugo Rodríguez, quien puso a prueba a Lejárraga. Con el paso de los minutos el peligro ante la portería grana era constante y Omar Pedomo tuvo su primera opción de marcar pero el portero murcianista, debutante como local esta tarde, evitó que llegara el 0-1. La primera parte estaba llegando a su final con un empate a 0 bueno para un Real Murcia que no creó peligro ante un rival que había realizado más méritos. Todo cambió en el tiempo de prolongación cuando Omar aprovechó la ocasión para conseguir el primer gol en una acción en la que Lejárraga no estuvo muy afortunado, Sin tiempo para más se llegó al descanso.

Tras el paso por el vestuario la situación cambió y el cuadro local se fue haciendo con el dominio del partido llegando con peligro ante la portería visitante. Marcos Legaz, en el cinco de la reanudación dispuso de la opción de lograr al empate pero no encontró portería. Las ocasiones comenzaban a llegar y el empate parecía estar cerca pero, cuando mejor estaban los granas, llegó un nuevo golpe con el segundo gol del San Fernando conseguido por Hugo Rodríguez, quien se lesionó en esa acción. 

Llegados a este punto Adrián Hernández decidió mover el banquillo dando entrada a los jóvenes Álex Melgar y Víctor Meseguer por un desaparecido Juanma Bravo y Álex Peque, quien tampoco aportaba nada al juego local. Los cambios fueron revulsivo ya que, cuando sólo llevaba cuatro minutos en el terreno de juego, Melgar se aprovechó de un error visitante para hacer el 1-2 y meter a su equipo un poco más en el partido. El público, que había despedido a los suyos con pitos al descanso, comenzó a creer en que la remontada era posible, más aún cuando en el minuto 71 Chumbi lanzó un balón contra el larguero e incluso en una acción posterior el delantero aguileño pudo ser objeto de un penalti. Desde ese momento y hasta el final el Real Murcia siguió metiendo presión al rival aunque sin llegar a conseguir el empate e incluso a falta de siete minutos para el final el portero local evitó el 1-3 ante Francis Ferrón.

Al final derrota de un equipo que sigue mostrándose demasiado débil en ataque y al que le cuesta mucho hacer un gol.