El presidente de Murcia, Fernando López Miras, y los alcaldes de Lorca y Puerto Lumbreras, el socialista Diego José Mateos y la popular María Ángeles Túnez, respectivamente, han mostrado este jueves su respaldo a los regantes contra la revisión de las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura.

En un acto organizado por la Comunidad de Regantes de Lorca, López Miras ha mostrado el “rechazo frontal” de Gobierno de Murcia a los planes del Ejecutivo central para modificar las reglas de explotación, que ha considerado un anticipo “del cierre del trasvase”.

El presidente se ha puesto “al lado de los regantes para cuantas acciones entiendan que debemos hacer” en defensa del acueducto y para acompañarlos su reivindicación de que se mantengan las reglas en vigor, porque el trasvase es “futuro, progreso y empleo” para la Región.

El alcalde de Lorca ha opinado que la “controversia” alrededor del trasvase no responde “a una cuestión ideológica sino territorial”, y ha señalado que en Murcia hay “unidad (política) para defender lo imprescindible que es” esa infraestructura, que ha considerado “irrenunciable”.

Mateos ha dicho que hay que “dotar de seguridad a los regantes, defender el trasvase y cualquier modificación que se haga debe ser por consenso, con todo el tiempo y las negociaciones que sean necesarios” antes de tomar una decisión.

El político socialista ha abogado por garantizar los caudales del trasvase y por incrementar de forma paralela las dotaciones procedentes de la desalación mediante las inversiones que sean necesarias.

La alcaldesa de Puerto Lumbreras, cuyo municipio tiene un 60 por ciento de la población activa vinculada al sector primario, ha mostrado el apoyo sin fisuras de la localidad a los regantes en sus reivindicaciones de estabilidad para el trasvase.

El presidente del Sindicato Central de Regantes del Tajo Segura (SCRATS), Lucas Jiménez, ha pedido al Gobierno de España “que actúe con razonamientos de Estado” y que “no toque las expectativas del trasvase porque va a afectar a una población muy importante en el Levante”.

Sobre las repercusiones económicas de la reforma en las reglas de explotación ha dicho que “generaría un agujero negro por el que aún no sabemos qué es lo que puede caer”, ha dicho Jiménez.

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El presidente de la Comunidad de Regantes de Lorca, Juan Marín, ha dicho que más del 30 por ciento del PIB de la comarca del Guadalentín depende del sector primario y, por tanto, de las aportaciones del trasvase del Tajo al Segura.

Ha considerado que si prospera el cambio en las reglas de explotación se dará “un golpe definitivo” a la economía de Lorca, de la comarca del Guadalentín y de toda la Región de Murcia, por lo que ha pedido “cordura” al Ejecutivo central para proteger una infraestructura que “da bienestar y empleo”.

Marín ha lamentado que un criterio “político y no técnico” esté detrás de la reforma de las normas de regulación de los caudales trasvasables y sirva para “atacar una infraestructura que está amortizada y que es necesaria” para una parte importante del país.