UCAM Murcia CF ha dado un paso atrás en el partido de este miércoles ante el Atlético Sanluqueño, con el que abría la segunda vuelta de la competición. El conjunto de Miguel Rivera, tras su triunfo de hace diez días ante el Don Benito, y las buenas sensaciones ofertadas en el partido de Copa del Rey frente al CD Mirandés, se presentaba en Sanlúcar con el objetivo de sumar tres puntos para seguir con "Operación Remontada". Los universitarios llegaban a este compromiso con la ausencia, por sanción de su goleador Isaac Aketxe y de su central Hugo Álvarez. El partido no pudo comenzar mejor para los muricanos ya que, cuando sólo habían pasado ocho minutos de juego, José Higón aprovechó un buen balón de Barbosa para colocar el 0-1. El arranque, muy similar al de Don Benito, hacía presagiar un buen partido. 

El UCAM se fue diluyendo con el paso de los minutos y comenzó a ver como el rival, entrenado por Abel Gómez, tomaba el mando del partido acercándose con cierto peligro ante la portería de Gianni. Los universitarios perdieron el control del centro del campo aunque el equipo seguía econtrándose cómodo sobre el terreno de juego. Todo cambió cuando pasada la media hora de juego una jugada desafortunada del central Gallas acabó con el balón en su propia portería. Los de Miguel Rivera empezaron a mostrarse excesivamente nerviosos y no lograban volver al camino de los primeros minutos. La llegada del tiempo de descanso parecía que podía favorecer a los intereses de los visitantes.

El arranque del segundo acto no pudo ser más desafortunado ya que en el minuto dos de juego Nando Quesada aprovechaba la primera acción ofensiva del Sanluqueño para poner el 2-1. Este gol terminó de desarmar a un equipo que se había ido diluyendo con el paso de los minutos y volvía a errores del pasado.

Miguel Rivera reaccionó rápido dando entrada en el terreno de juego a Perales y David Mayoral para buscar más profundidad pero el equipo no llegó a encontrar su sitio en el terreno de juego. Los minutos iban pasando y las ocasiones no teminaban de llegar mientras los locales esperaban al rival para intentar sorprenderlo en alguna contra. En la recta final UCAM tuvo, a falta de tres minutos, su opción pero el guardameta local, Isma Gil, evitó el gol de la igualada.

Tras este tropiezo el cuadro universitario volverá a jugar el próximo domingo, a las 12 del mediodía, frente a la Balompédica Linense.