Dos de los cinco acusados por el crimen ocurrido en noviembre de 2017 en Águilas durante la reyerta protagonizada por dos familias en la que perdió la vida un miembro de una de ellas, han dicho este viernes en la Audiencia Provincial de Murcia que no tuvieron nada que ver con su muerte, mientras que otros dos acusados han declarado lo contrario.

En esta segunda sesión de la vista oral que se desarrolla ante un jurado popular ha declarado en primero lugar David M.M., considerado por la fiscalía como la persona que apuñaló con una navaja de grandes dimensiones al hombre que resultaría fallecido y para el que se piden hasta 25 años de cárcel por un delito de homicidio consumado y otro intentado.

Este procesado que en el transcurso del enfrentamiento, y cuando estaba en el suelo, se encontró una navaja, que cogió solo para defenderse, no para utilizarla contra nadie.

No obstante, ha añadido, en la trifulca se le acercó una persona que no pudo saber quién era porque él llevaba la cara ensangrentada por los golpes recibidos y que se debió cortar al sujetarlo.

Por su parte, su cuñado, Manuel A.F, para quien se solicitan siete años y medio de prisión como inductor y cooperador necesario en el homicidio, ha negado que entregara al anterior, cuñado suyo, la navaja con la que se produjeron las mortales puñaladas, con lo que corroboraba así la versión dada por el anterior.

El siguiente en declarar ha sido Andoni A.F., hermano de Manuel, quien ha obligado a suspender por unos momentos el desarrollo normal de la vista al sufrir un vahído.

Repuesto de la indisposición, Andoni, al que solo denunció la acusación particular, ha declarado que se mantuvo siempre en la distancias, por lo que en ningún momento pudo sujetar a nadie para facilitar que fuera agredido por algún miembro de la otra familia.

El último en declarar en esta segunda sesión ha sido Diego R.L., uno de los hijos del fallecido que acompañaron a este en su visita a la vivienda de la otra familia y quien ha manifestado que acudieron en son de paz y porque aquel quería explicarle, desde su veteranía, como se deben resolver los conflictos entre los miembros de la etnia gitana.

Este acusado ha señalado que vio cómo Manuel A.F. le entregaba la navaja a David M.M. al tiempo que le decía que matara a uno de los hijos del fallecido, aunque finalmente la víctima sería este, al interponerse entre el agresor y aquellos.

La vista oral continuará este lunes con la declaración del quinto acusado, Michael R.L., otro de los hijos del fallecido