Las obras de construcción del tramo Lorca-Pulpí del Corredor Mediterráneo de alta velocidad ferroviaria afectarán a 535 parcelas de suelo lorquino, cuyos propietarios están citados en el Centro de Desarrollo Local en la primera semana de febrero para firmar las actas de ocupación definitiva y completar el trámite de las expropiaciones.
El alcalde, Diego José Mateos, ha dicho que según sus informaciones en la mayoría de los casos se han alcanzado acuerdos de conformidad por parte de los afectados, mientras que el concejal de IU Pedro Sosa ha citado ejemplos en los que recibirán 37 céntimos de euro por metro cuadrado expropiado.
El suelo que será expropiado suma 124,4 hectáreas solo en el municipio de Lorca, en las pedanías de Campillo, Torrecilla y Almendricos.
El paso del Corredor Mediterráneo por el municipio está dividido en tres tramos: La Hoya-Lorca, donde se construye ya un viaducto; el tramo Lorca-Lorca de integración urbana en la ciudad con la fórmula del soterramiento, en fase de redacción del proyecto; y el tramo Lorca-Pulpí, que tiene 35 kilómetros.