Los casi 500 trabajadores de la empresa Agrícola Aguileña S.A. (Agrasa) que serán despedidos por la liquidación de la firma mantienen la huelga indefinida que emprendieron hace 19 días y han convocado una manifestación el 20 de diciembre para defender sus derechos laborales y en contra del cierre.

El sindicato CCOO ha recordado  que los trabajadores iniciaron la huelga por el retraso reiterado en el pago de los salarios, ya que desde hace meses la empresa incumple esa obligación y ha recordado que el anuncio del despido colectivo se produjo al cumplirse el cuarto día del paro.

Ángel Torregrosa, secretario general del sindicato en la comarca del Guadalentín, ha explicado que en la actualidad hay trabajadoras que aún no han cobrado el suelo del mes de octubre y que la mensualidad de noviembre no ha sido abonada a ningún empleado.

Los impagos y el acuerdo de cierre ya han abocado a un “importante número” de empleados a darse de baja en Agrasa para buscar trabajo en otras empresas del sector.

Ante lo delicado de la situación, los comités de empresa y los trabajadores han decidido manifestarse dentro de una semana “por sus derechos y contra los despidos” por el centro de la ciudad y han demandado “la solidaridad del pueblo de Águila” en su protesta.

Torregrosa también ha solicitado a los partidos políticos que presenten propuestas de “empleo estable” para los afectados por el despido colectivo y para minimizar el impacto que la crisis de Agrasa tendrá en la actividad económica de la ciudad y en el sector agroalimentario.

La empresa será liquidada por pérdidas que se acercan a los 15 millones de euros y dejará en la calle a la totalidad de su plantilla, 481 trabajadores, en su mayor parte mujeres y algunas con más de 30 años de vinculación a la firma.