La Guardia Civil ha desmantelado en Cartagena dos invernaderos clandestinos de marihuana con 1.400 plantas, con un peso aproximado de tres toneladas, y ha detenido a las dos personas que los regentaban, informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.

Las actuaciones se iniciaron en noviembre de 2020, cuando el Instituto Armado tuvo conocimiento del presunto uso de una nave industrial como invernadero clandestino para la producción intensiva de marihuana.

Los primeros pasos de la operación, denominada 'Muncha', permitieron verificar las sospechas sobre la actividad ilícita relacionada con el cultivo y posterior manipulación ilícita de cannabis, por lo que se estableció un dispositivo de vigilancia sobre el inmueble.

Una vez obtenidos todos los indicios, previa autorización judicial, la Guardia Civil llevó a cabo la entrada y el registro de la nave, donde se halló una compleja instalación que sorprendió a los investigadores por su capacidad para evitar ser detectada desde el exterior.

Durante el registro se aprehendieron 700 plantas de marihuana, todas ellas a punto de ser recolectadas, y todos los objetos usados para su cultivo y posterior preparación y venta, entre ellos decenas de lámparas de última generación, productos fitosanitarios y numerosos dispositivos de aire acondicionado.

Los guardias civiles continuaron con la investigación para verificar la posible existencia de más invernaderos clandestinos. Fruto de ello se logró conocer la ubicación de otra nave industrial, también en el municipio cartagenero y presuntamente vinculada al tráfico de drogas.

Previa autorización judicial, la Guardia Civil llevó a cabo la entrada y el registro de la segunda nave, en cuyo interior se halló otro invernadero dedicado a la producción intensiva del cannabis con 700 plantas dispuestas para ser recolectadas. También se incautó un elevado volumen de material eléctrico y de fontanería empleado para el cultivo de marihuana.

Ambas plantaciones tenían una instalación idéntica y usaban los mismos productos, lo que permitió verificar que los propietarios de esta segunda plantación eran los mismos que los de la primera, iniciando un dispositivo de búsqueda sobre los sospechosos, que ha culminado en los últimos días con su detención como presuntos autores de un delito contra la salud pública, por cultivo o elaboración de drogas, y de un delito de defraudación de fluido eléctrico, por conectar de forma ilícita las plantaciones a la electricidad.

La operación, en la que se ha contado con la colaboración de Iberdrola, se ha saldado hasta el momento con la aprehensión de 1.400 plantas de marihuana y la incautación de todos los elementos que componían los sofisticados sistemas de iluminación, calefacción, riego y ventilación de ambos invernaderos clandestinos.

Los dos detenidos, la droga aprehendida, los efectos incautados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Cartagena.