La consejera vasca de Salud, Gotzone Sagardui, ha confirmado que la medicación a domicilio a colectivos más vulnerables "han llegado y se van a quedar" porque el alcance de este servicio ha sido notable, en concreto, un total de más de 676.000 enfermos crónicos y polimedicados se han beneficiado de este servicio, se ha llevado la medicación a 12.500 domicilios, y se han atendido más de 90.000 llamadas telefónicas.

"Es un agradecimiento sentido, de los que nos tiene que hacer sentirnos muy orgullosos a los farmacéuticos y farmacéuticas, porque eso se palpa", ha dicho Sagardui durante su intervención esta tarde en la jornada telemática 'La farmacia comunitaria durante la covid-19', organizada por la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao.

A preguntas de los participantes en la jornada sobre las medidas implementadas "de urgencia" por motivo de la pandemia y que puedan quedarse tras ella, Sagardui ha indicado que "también la aplicación ordenada en aquellas medicaciones que se sirven en los hospitales es algo que no va a modificarse después del paso de la pandemia", como aquellos medicamentos que se venían administrando en receta de papel y que ante estas circunstancias se han incorporado a los protocolos de la receta electrónica.

Otro paso "importante" que, según ha manifestado, "ha venido para quedarse" es el de las nuevas mutualidades que se han incorporado a la receta electrónica. "Esas iniciativas seguro que van a mantenerse en el tiempo. Además, se han puesto en marcha de forma rápida y conscientes de que la necesidad merecía del esfuerzo de su implantación y que en otras circunstancias la hubiéramos puesto en marcha, pero igual no con esta celeridad y esta calidad con las que las hemos puesto ahora", ha agregado.