Tras la tradicional primera reunión del curso del consejo de Gobierno en el donostiarra Palacio de Miramar, ellehendakari Iñigo Urkullu se ha referido asimismo a uno de los grandes retos que afrontará su Gobierno este otoño político, la negociación de los Presupuestos para 2019.

Este año esta negociaicón va a ser más dificil que en años anteriores tras la ruptura con el PP después del apoyo del PNV a la moción de censura contra Mariano Rajoy.

Urkullu ha defendido el grado de ejecución y cumplimiento de los compromisos presupuestarios acordados el año pasado con el PP y ha incidido en que si los populares rechazan negociar serán ellos quienes deban explicar las razones.

Además el lehendakari ha reclamado ensanchar los consensos alcanzados hasta ahora sobre el nuevo estatus en la ponencia de autogobierno para que el texto final pueda tener recorrido institucional y no se estrelle a las primeras de cambio en las Cortes o acabe en el Tribunal Constitucional.

Urkullu ha confiado también en que en breve se desbloqueen las negociaciones en torno a las transferencias pendientes y confía en alcanzar cuanto antes un calendario concreto de traspasos que permita intensificar e impulsar las negociaciones para completar las 37 transferencias pendientes.