El Servicio Riojano de Salud (SERIS) ha detectado tres nuevos brotes de COVID-19 localizados en Logroño y que afectan a 25 personas, que se encuentran en asilamiento en sus domicilios, de modo que en La Rioja hay actualmente ocho brotes activos que suman 65 positivos.
El mayor de los tres brotes deja 19 positivos confirmados y tiene su origen epidemiológico en el contacto familiar, mientras que los otros dos, causados por contacto laboral, tienen tres positivos cada uno, ha detallado el Gobierno riojano en una nota.
Respecto a la situación hospitalaria, hay cinco pacientes ingresados por COVID-19 en el Hospital San Pedro de Logroño, otros dos en la Fundación Hospital de Calahorra y un total de 223 casos activos en La Rioja.
La Consejería de Salud ha insistido en la necesidad de mantener las medidas de higiene de manos y de distancia social, así como la obligatoriedad en el uso de la mascarilla.
La detección precoz de estos brotes ha sido posible gracias a las labores de seguimiento de los casos confirmados de la enfermedad, ya sean sintomáticos como asintomáticos, y al de sus contactos estrechos.
Actualmente, La Rioja cuenta con un rastreador por 3.700 habitantes.
De los ocho brotes activos, el más antiguo es el de Nieva de Cameros, con cuatro casos desde el 2 de agosto; en Alesanco se notificaron seis casos el día 5; en San Asensio otros seis positivos el 7 de agosto; y en Logroño, cinco casos más el día 8.
En Medrano, hay ya 23 casos confirmados desde el 10 de agosto; a los que se suman los tres nuevos brotes de Logroño, el de 19 casos confirmado el día 12 y los otros dos de tres casos notificados ayer, 13 de agosto.