Logroño Integración del Ferrocarril (LIF) ha resuelto el contrato con la UTE que llevaba las obras de construcción del túnel de Vara de Rey, lo que deja disponibles los terrenos para acometer labores de acondicionamiento y da vía libre para licitar un nuevo contrato para finalizar las obras, según ha informado hoy el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento de Logroño, Jaime Caballero.

A las labores de desbroce que se han podido observar esta semana en la zona se sumará los próximos días las de desescombro de los materiales que quedaban en la obra. El nuevo proyecto de urbanización del nudo de Vara de Rey se encuentra actualmente en periodo de exposición pública después de ser aprobado inicialmente el pasado mes de julio por la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Logroño.

Al mismo tiempo, ha comunicado Jaime Caballero, ha sido ratificada con el Consejo de Administración de LIF la resolución del convenio que mantenía con el Ayuntamiento de Logroño para la ejecución de la alternativa C que proponía la construcción de un túnel. Tras la aprobación definitiva del nuevo proyecto de urbanización del nudo de Vara de Rey será necesario firmar un nuevo convenio para licitar y poder reiniciar las obras.

Este cambio de opción supone un ahorro para el Ayuntamiento de 588.000 euros, tras la indemnización de 276.605,70 euros, que podrá ser utilizado en la nueva urbanización del entorno.

El proyecto de urbanización del nudo de Vara de Rey, aprobado de forma inicial por la Junta de Gobierno Local, propone un cruce semaforizado. “El deseo del Equipo de Gobierno, ha indicado, es transformar esta zona de la ciudad en un espacio urbano que dé prioridad a las personas, a los itinerarios peatonales, a la movilidad activa y los medios de sostenibles como el transporte colectivo que en la calle Vara de Rey tiene un especial protagonismo como eje de conexión norte sur”.

El proyecto propuesto incluye la trasformación del tramo de Duques de Nájera entre los número 2 y 8 en calle peatonal a la que se dotará de arbolado para para mejorar las condiciones climáticas y contribuir a la reducción del ruido. En total, ha detallado Caballero, “pasamos de un proyecto que sólo dejaba un 30% de espacio para los peatones a una solución que alcanzará el 65% para espacio público, una distribución del espacio que es coherente con los principios de la movilidad sostenible y el modelo de ciudad que queremos impulsar y que está alineado con la directivas europeas, los ODS 2030 y la agenda urbana”.

El concejal de Desarrollo Urbano Sostenible ha pedido disculpas por las molestias que está suponiendo la paralización las obras, “pero se justifica dada la importancia y el impacto que tiene esta infraestructura en la ciudad. Merece la pena conseguir una buena solución, dado que el resultado permanecerá durante décadas y definirá no solo el nudo sino el entorno y de alguna forma también nuestros hábitos de movilidad".