Durante el año 2020 se han renovado las instalaciones de alumbrado público de las urbanizaciones de Punta Prima y S'Algar a San Luis; la de Son Vilar Es Castell, las de Son Parc y Covess Noves Es Mercadal y la de Santo Tomás Migjorn Gran. El objetivo de estas actuaciones es mejorar la eficiencia energética y disminuir la contaminación lumínica para cumplir con el reglamento de protección del medio nocturno de Menorca.

Se trata de la primera fase de los proyectos de mejora de alumbrado en urbanizaciones que se llevarán a cabo en todos los municipios de Menorca.

A continuación se detallan los importes adjudicados y las empresas que han ejecutado las obras de cada urbanización:

1. San Luis, Punta Prima: 27.273,71 € (IVA excluido)
- FERROSER INFRAESTRUCTURAS SA

2. San Luis, S'Algar Ciudad Jardín fase II: 58.500,07 € (IVA excluido)
- XIFRAM SL

3. Es Castell, Son Vilar: 63.957,35 € (IVA excluido)
- FERROSER INFRAESTRUCTURAS SA

4. Es Mercadal, Coves Noves I y Son Parc fases 1 y 2: 92.650,87 € (IVA excluido)
- FERROSER INFRAESTRUCTURAS SA

5. Es Migjorn Gran, Santo Tomás: 37.149,39 € (IVA excluido)
- CITELUM IBERICA SA

Las cinco actuaciones incluidas en esta primera fase, contemplan la sustitución de lámparas de descarga por tecnología LED de las luminarias del alumbrado exterior, lo que permitirá un ahorro directo del consumo eléctrico cercano al 60%, y que repercutirá en la reducción de la factura eléctrica de los ayuntamientos.

De cara el 2021 está prevista una segunda fase de los proyectos de mejora de alumbrado en urbanizaciones, pendiente de licitación, en el resto de municipios: Cala en Porter en Alaior por un importe de 130.870,00 €, Cala en Blanes en Ciutadella por un importe de 317.115,00 €, Cala Galdana en Ferreries por un importe de 55.226,00 €, es Grao en Maó por un importe de 24.387,00 € y sa Mesquida en Maó por un importe de 48.771,00 €.

La renovación de las instalaciones de alumbrado cumple con las condiciones establecidas en el Reglamento de Protección del Medio Nocturno de Menorca, documento que permitió establecer prioridades de actuación no sólo para mejorar la eficiencia energética, sino también reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, reducir la contaminación lumínica y mejorar la calidad del cielo nocturno, para ofrecer una mejor experiencia de observación del firmamento.