La crisis social y económica originada por la propagación de la pandemia mundial Covid-19 ha puesto de manifiesto las desigualdades existentes entre los diferentes colectivos de nuestra sociedad y se ha dejado patente de las carencias que surgen ante una situación como ésta a colectivos más vulnerables, dificultando que éstos puedan cubrir sus primeras necesidades y acentuando, aún más, su fragilidad y exclusión social.

Conscientes de esta realidad, el departamento de Bienestar Social del Consell aumentó su presupuesto anual para dar apoyo y acompañamiento a las nuevas necesidades sociales surgidas de la pandemia. Uno de los programas de atención social que se ha visto reforzado es el de las ayudas alimentarios destinados a los colectivos más vulnerables y gestionados por Cáritas y Cruz Roja.

En concreto, el servicio se ha visto incrementado hasta 40.000 € para cada una de las dos entidades mencionadas, duplicando el presupuesto de los últimos años, sumando un presupuesto total de 160.000 €. Así, cada entidad, Cruz Roja y Cáritas Diocesana, recibirá 80.000 €. La finalidad de esta iniciativa es garantizar una alimentación equilibrada y saludable para las personas vulnerables que por diferentes motivos pueden tener algún déficit de alimentación, y contribuir a que todos tengan acceso a la alimentación básica. Los beneficiarios también podrán adquirir productos de higiene.

Cabe recordar que este programa consiste en la donación de producto fresco km0 a las personas solicitantes a través de una de las dos entidades y del reparto de tickets a los solicitantes los que se pueden canjear directamente a los comercios. De esta manera también se incentiva la compra en comercios locales y de proximidad ayudando a dinamizar su actividad económica.